La fría mañana no fue impedimento para que autoridades provinciales, docentes, alumnos y sanjuaninos honraran la figura de Domingo Faustino Sarmiento en el Día del Maestro.
El acto central se realizó, como siempre, en el Carrascal, ubicado en Avenida Libertador y Sarmiento, lugar donde se ubica el Museo Casa Natal de Sarmiento.
El gobernador arribó a las 10 de la mañana para pasar revista y saludar a la Agrupación 11 de Septiembre junto al jefe del RIM 22, José Carlos Hilgert.
Allí se entonaron los himnos, se entregaron ofrendas florales y finalmente se distinguió a los alumnos de la escuela Obispo Zapata de Caucete, por su logro obtenido en el certamen nacional “Maestros Argentinos” donde resultaron ganadores con su proyecto “Morning Club”.
A su vez, los directivos de la escuela le hicieron entrega al gobernador de la distinción como Embajador Magna Plus, de éste portal educativo. Este premio reconoció los esfuerzos y creatividad para la incorporación de las nuevas tecnologías en la educación de la provincia de San Juan, del gobernador Sergio Uñac.
Posteriormente tomó la palabra el ministro de Educación, quien emuló a Sarmiento y recordó su importantísima obra en cuanto a la educación. El jefe de la cartera sanjuanina se refirió a importantes políticas educativas que en San Juan se llevan a cabo, inspiradas en el legado y pensamiento sarmientino.
Posteriormente hizo uso de la palabra el gobernador Sergio Uñac. Aquí un fragmento de su discurso:
“Mucho se habla de las personas que inspiran. Las que marcan un antes y después en la sociedad y en nuestros corazones. Las que nos mueven hacia adelante.
Son aquellas cuyo comportamiento, genialidad, fortaleza y dinámica nos permiten sacar lo mejor de cada uno.
Hacen de por sí un increíble trabajo y motivan a que otros también sigan esa senda.
Hoy como muchos días, pensamos en Sarmiento.
Y también, pensamos a Sarmiento.
Se trató de un hombre cuyas ideas se volcaron al mundo, fraguando en una sola persona al intelectual, y al hombre de acción que buscó a través de la política modificar la realidad de su tiempo y las generaciones que le seguirían. Cuya visión y perspectiva lo hicieron un estadista.
No se quedó en la palabra, que tan maravillosamente administraba.
Pocos hombres de nuestra historia despiertan tanta controversia, como Domingo Faustino Sarmiento. Fue el gran maestro, pero también escritor, periodista, militar, político exiliado, senador, Gobernador de San Juan y presidente de la Nación.
El hijo de Doña Paula y el hijo pródigo de San Juan, todavía genera debates, como si sus propuestas hubiesen visto la luz recientemente.
Su pensamiento que ha sido mirado tanto desde la controversia como de la admiración. Y es un factor insoslayable en la historia americana.
Se trató de una verdadera fuerza histórica, de un inmenso pensador después del cual no se pudo seguir pensando como antes.
Carlos Pellegrini dijo del sanjuanino: “Fue el cerebro más poderoso que haya producido la América toda», pero no solo fue un cerebro poderoso, Fue también un hacedor. Un hombre comprometido con construir, un hombre que hizo, que dejó plasmado su pensamiento en obras: mil kilómetros de ferrocarriles, cinco mil kilómetros de telégrafos, más de 800 escuelas durante su presidencia, el primer censo nacional y fundamentalmente el legado de la educación como el gran articulador de la sociedad argentina.
Es que Sarmiento siempre miró el futuro, imaginando, construyendo, con una premisa que casi fue obsesión: la educación pública debía ser el punto de partida para la creación de una república de ciudadanos.
Su bandera política innegociable fue educar al soberano, y ahí hizo la diferencia.
Frente a una sociedad en la que predominaba la desigualdad, la propuesta de Sarmiento fue la educación, educación como pie de igualdad que generase oportunidades.
“El poder, la riqueza y la fuerza de una nación dependen de la capacidad industrial, moral, e intelectual de los individuos que la componen; y la educación pública no debe tener otro fin que el aumentar estas fuerzas de producción, de acción y de dirección, escribió Sarmiento en “Educación Popular”. Asi pensaba y asi actuaba el gran maestro de América.
En este día tan especial quiero reconocer a los alumnos, directivos y docentes de la Escuela Obispo Zapata, de Pozo de los Algarrobos, quienes días atrás se impusieron entre miles de equipos, en la Maratón Nacional de Programación y Robótica y obtuvieron el premio Maestros Argentinos 2019.
Renuevo mis felicitaciones y demás está decir, que todos los sanjuaninos estamos orgullosos de estos docentes y alumnos que demostraron que cuando se quiere, se puede. Alumnos y docentes que inspiran como inspira Sarmiento.
A 131 años de su fallecimiento, el Maestro de América nos sigue inspirando: sus ideas, tan geniales, plataforma para soñar un país, resuenan nítidas y con mucho más volumen, cuando la patria sufre. Sólo hace falta escucharlas.
A Sarmiento desde su tierra lo honramos inspirándonos en su ideario”.
Posteriormente, se dio por finalizado el acto y se abrió el Desfile Cívico Militar, que tuvo como protagonistas a alumnos, asociaciones civiles, institutos de enseñanza, fuerzas de seguridad y, por supuesto, las banderas de ceremonia, incluyendo a la Bandera de Cabot, nueva insignia provincial.